martes, 11 de febrero de 2014

Susana Martín Belmonte: “Siempre hay más deuda que dinero para pagarla, por eso es impagable” (Economía Insostenible)

ejemplo en Málaga → Susana Martín Belmonte: “Siempre hay más deuda que dinero para pagarla, por eso es impagable” (Economía Insostenible) Publicado en 22/03/2013 de invitadoespecial Susana Martín Belmonte, economistaEntrevista de BlogSOStenible a Susana Martín Belmonte, economista autora de «Nada está Perdido», libro que ya examinamos en BlogSOStenible, y autora del blog Soberanía Financiera. 1. Los países ricos piden deuda casi diariamente ¿Es verdad? Sí. De hecho una tendencia muy marcada en el mundo en la actualidad es que los países pobres financien a los ricos. Esto se denomina financiarización. Hay países, con Estados Unidos y Reino Unido a la cabeza, que están en esta línea. En muchos casos, se trata de deuda no exigible, en forma de acciones bursátiles, por ejemplo. De este modo la posición de dominio, el hecho de ser ricos, no se basa en tener más dinero, sino en esa capacidad de atraer el ahorro externo, de endeudarse en condiciones privilegiadas. 2. Entonces ¿no tiene el Sistema Económico el objetivo de reducir la deuda? En absoluto. El sistema monetario actual tiene una morfología tal que lo que provoca es una masa monetaria creciente, una deuda creciente y, sobre todo, una deuda impagable creciente. Hay que tener muy presente la diferencia entre deuda, sin más, y deuda impagable. La deuda impagable surge de la creación monetaria como deuda con interés. 3. ¿Es sensato y sostenible tener una deuda perenne? De hecho las grandes empresas tienen siempre grandes deudas. Sí. Lo que no tiene sentido es pagar interés por esas posiciones deudoras. Y tampoco tiene sentido el abuso que ha habido de ciertos tipos de crédito, como el crédito al consumo, que ha tenido la función de permitir que el consumo aumentara sin aumentar la masa salarial. El resultado es una deuda privada insostenible en muchos países. Sin embargo, también hay un lado positivo en la deuda, y es que una economía en la que hubiera capacidad de endeudamiento ágil sin interés, sobre todo para financiar la economía productiva, nos sacaría el paradigma de la acumulación. La disponibilidad de crédito elimina en gran medida la necesidad de ahorrar, de acumular. En mi opinión esto es positivo, abre todo un nuevo paradigma. 4. ¿Un nuevo paradigma basado en la deuda? ¿El tener grandes deudas no tiene efectos en la sociedad y en la naturaleza? Como decía antes, hay que distinguir entre deuda y deuda impagable. El dinero actual es un sistema de deuda en sí. Puesto que ya no hay oro ni ningún otro respaldo, el dinero es un activo para un agente porque es un pasivo para otro. La deuda es consustancial al dinero moderno. No creo que algo así sea negativo. En el caso del modelo monetario actual, el pasivo está sobre el sector generador de dinero, gobiernos centrales y bancos. El problema es que además este modelo genera deuda impagable porque toda unidad monetaria que entra en el circuito económico lo hace como deuda con interés. Esto significa que siempre hay más deuda que dinero para pagarla, por eso es impagable. 5. Para devolver el dinero prestado ¿es fundamental que la economía crezca? Exacto. En el sistema monetario actual, lo único que nos permite devolver los créditos anteriores son nuevos créditos, puesto que el interés no se puede devolver porque nunca ha sido creado. Aunque parezca difícil de creer, la realidad es que si entre todos los miembros de una comunidad pedimos prestados, por ejemplo, 100 euros, al año siguiente deberemos 100 más el interés, que si por ejemplo es de 10%, entonces debemos 110. Pero solo existen 100 unidades monetarias, que son las que se han prestado. Es de locos, entre todos tenemos que devolver 10 unidades monetarias que no existen. Así que hay que volver a pedir nuevos créditos para crear el dinero que falta, salvo que la única razón por la que el sector financiero presta dinero es porque hay posibles beneficios a la vista, con lo cual, la economía tiene que crecer todo el tiempo.La crisis actual de los países ricos no es una crisis aún grave. 6. Si todo sigue como hasta ahora, ¿se dirige le sistema económico hacia el colapso? Sin duda. 7. ¿Cómo podría ser este colapso? Tenemos varios tipos de colapso a la vista. En primer lugar, el colapso de los recursos naturales y energéticos. Estamos dilapidando el petróleo y algunas materias primas de difícil o imposible sustitución y permitiendo que el medio ambiente se deteriore enormemente. Por otro lado tenemos el colapso social: Estamos viendo que cada vez hay más “perdedores” en el sistema socioeconómico y no es esperable, ni deseable, que se limiten a morirse de hambre de forma pacífica. El colapso bancario puede venir en cuanto las exigencias del sistema financiero se pasen de la raya, la fina raya que hace peligrar la confianza del público en el sistema: por ejemplo, en Chipre se anunció que la banca requisaría alguna parte de los depósitos de los usuarios, pero la reacción de todas las bolsas en Europa ha sido tan virulenta a la baja que todo el sistema se ha tambaleado. 8. ¿Cuándo estima usted que ocurrirá? Económicamente el sistema ya ha colapsado. Lo hizo en 2008. Lo que tenemos ahora mismo está en pie por voluntad política. En cuanto esa voluntad de subvencionar este sistema quebrado cese, el sistema caerá. Es importante tener dispuesta una alternativa para entonces. 9. Entonces ¿El colapso económico tiene relación con el pico del petróleo? Sí, por supuesto. El sistema monetario exige un crecimiento exponencial del sistema económico. Esto provoca la sobre-explotación de los recursos de planeta: así hemos llegado al pico del petróleo y el agotamiento previsible de esta fuente de energía podría suponer una razón más para que el crecimiento económico se detenga y el sistema económico colapse. 10. ¿Qué debería hacer la gente en un momento como este? Deberían buscar formas de vida sostenible, incluyendo un sistema monetario sostenible. Empezar a montar o a utilizar monedas sociales en las que la creación monetaria sea sin interés, que permitan un modelo productivo sostenible. El sistema monetario actual obliga a que la economía mundial crezca al ritmo del tipo de interés compuesto, que es exponencial, necesitamos un modelo monetario en el que se pueda no crecer o crecer a un ritmo mucho menor a partir de cierto punto de desarrollo. Eso no es posible con el modelo monetario actual.

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